SALUDO
Bienvenido nuevamente a nuestro Podcast de Iglesia Bautista Miramonte, en donde semana, tras semana buscamos los “Pasos Hacia El Gozo”. Soy Francisco Cáceres y en esta ocasión, abordaremos la pregunta: ¿Cómo puedo mantener el gozo del Señor cuando mis compañeros señalan mi fe?
INTRODUCCIÓN
La sociedad actual puede que hable mucho de la tolerancia y del respeto, sin embargo, pareciera que esto no se aplica para aquellos que creemos en Dios, que compartimos de una relación personal con Jesús. Se escuchan diferentes tipos de señalamientos, como por ejemplo hacia la iglesia, como un lugar lleno de hipócritas. También se señala el cristianismo como una simple religión, en la que se le “lava el cerebro” a las personas. Muchas veces lo que se señala es que muchos dicen ser cristianos, pero la forma en que viven no lo refleja, y, por lo tanto, nos cuentan como uno más de los que nos somos consecuentes con lo que decimos creer. Pueden ser hasta señalamientos más superficiales, como considerar que el cristianismo es aburrido y no hay lugar para la diversión y por ello se nos excluye de cumpleaños o salidas con amigos, etc. Puede haber más ejemplos de cómo se señala a los que creen en Jesús, sin embargo, deseo que podamos abrir la Palabra de Dios y considerar lo siguiente:
TEXTO
En el evangelio según Mateo, capítulo 5:11–12, encontramos las palabras de Jesús en las Bienaventuranzas, en las cuales decía: “Dios los bendecirá a ustedes cuando, por causa mía, la gente los maltrate y diga mentiras contra ustedes. ¡Alégrense! ¡Pónganse contentos! Porque van a recibir un gran premio en el cielo. Así maltrataron también a los profetas que vivieron antes que ustedes.” (TLA)
COMENTARIO
Jesús estaba anticipando que, de forma específica, por su nombre, por causa de Él, por compartir que somos sus discípulos, que hemos puesto nuestra fe en él, vamos a ser maltratado, vamos a pasar malos momentos en los que hasta hablarán con mentiras sobre nosotros, sin embargo, lo que Jesús nos anima es a mantenernos con alegría, con gozo al recordar que no hemos sido los primeros que hemos tenido que pagar un costo por compartir sobre nuestra fe. Esto no quiere decir que las palabras que la gente utiliza no duelan, que el rechazo no nos afectará, que no sentiremos un golpe en el corazón cuando personas que apreciamos sean las que se burlen o hagan comentarios negativos a cerca de nuestra fe en Jesús. Sin embargo, a pesar de ello, podemos estar seguros que estamos agradando a nuestro Salvador a mantenernos fieles a su nombre y al no negar la relación que tenemos con él. Eso dio esperanza y propósito a los profetas, miles de años atrás, y nos ayudará a mantener el gozo a nosotros hoy.
Pablo también le recordó a Timoteo en la segunda carta que le escribió, capítulo 2:3–4: “Tú, como buen soldado de Jesucristo, debes estar dispuesto a sufrir por él. Los soldados que tratan de agradar a sus jefes no se interesan por ninguna otra cosa que no sea el ejército.” (TLA) De esta forma, Pablo también nos anima a tener en mente que el camino no es fácil, pero estamos claro a quién deseamos agradar
CONCLUSIÓN
Así que, si estás en medio de una situación como la que hemos descrito en este episodio, hay un par de cosas que espero que puedas recordar:
- Que puede haber bendición aún en medio de la crítica y las mentiras que se puedan decir de ti como discípulo de Jesús.
- Que puedes encontrar alegría, así como los profetas lo hicieron en el Señor a pesar de ser perseguidos hasta la muerte.
- Que nunca se menciona en la Biblia que seguir a Jesús es un camino fácil, sino uno en el que debemos estar firmes en lo que creemos y resistir.
- Que nuestro testimonio dará fruto y muchos de los que critiquen lo que creemos pueden ser impactados por las reacciones que tengamos hacia ellos, por el amor que podamos tenerles a pesar de que ellos desean mal para nosotros, por nuestra devoción a nuestros Salvador.
DESPEDIDA
Esta semana, mantengamos el gozo, dentro de nuestro trabajo o lugar de estudio aún cuando seamos señalados por creer en Jesús. Hasta el próximo episodio.
Categorías: Caminando con Dios