Para cerrar esta serie de devocionales, debemos recordar los compromisos que hasta ahora hemos tomado:
Ahora ¿Cómo logramos mantener estas decisiones a través del tiempo? ¿Cómo logramos mantenernos firmes a pesar de las circunstancias? El reto que queremos dejar para cerrar esta serie de devocionales es que levantemos murallas alrededor de nuestra familia, para estar preparados para los ataques del enemigo y aun después de ellos, permanecer de pie para la gloria de Dios. Quiero compartir, algunos desafíos muy prácticos que podemos hacer como familias para que nuestras decisiones perduren:
Los hijos que Dios nos da son una bendición, pero conllevan la gran responsabilidad de prepararlos para la vida por medio de mostrarles la Palabra de Dios. Tome un tiempo para salir en una cita con sus hijos y ponga sobre la mesa alguno de los siguientes temas: sexualidad, plan de vida, áreas de pecado que deban dejar, amistades etc. Muéstreles lo que la Biblia dice sobre esos temas (u otros que considere importante) y no permita que otras personas cumplan el rol de instruirlos, que es principalmente nuestro como padres.
En el caso de hogares con padres ¿qué límites tendrán nuestros hijos? Tipos de amistad, de qué manera se prepararán profesionalmente, qué herramientas tecnológicas podrán usar y cuáles no, etc. Recuerde que los límites debemos ponerlos los padres en concordancia con la Palabra de Dios y no ellos.
Estos son algunos retos muy prácticos que como familias podemos llevar a cabo para levantar murallas espirituales en nuestras familias. Que Dios nos ayude en este desafío de ser familias con fundamentos, fructíferas, con el molde original y que perduren hasta que el Señor regrese por nosotros.